El coro estaba haciendo su último ensayo en medio de un
Estruendo de todos los demonios, porque los tramoyista y
Los técnicos estaban dando los últimos toques para poner a
Punto el escenario.

Pero, cuando un tipo se puso a dar unos martillazos que
Producían un estrépito verdaderamente insoportable, el
Director del coro interrumpió el canto y se le quedó
Mirando suplicante.

“No se interrumpa por mí, señor director”, dijo
Alegremente el del martillo, “no me molestan”.


********************************************************************


Una mujer salió de la ducha –completamente desnuda,
Como es lógico- y, cuando iba a coger la toalla, vio,
Horrorizada, que había un hombre en un andamio
Limpiando la ventana y mirándola complacido.

Le produjo tal sorpresa la inesperada aparición que se
Quedó totalmente paralizada, mirando asombrada a aquel
Sujeto.

“¿Qué pasa, señora?”, preguntó alegremente el individuo,
“¿no ha visto nunca a un limpiaventanas?”